Va de nuez o La violencia de Violeta
Recuerdo haber leído en Océano Mar sobre un personaje enfermo de sensibilidad. Ella -recuerdo que era una mujer de 15 años- era tan sensible al mundo que vivió encerrada en su habitación, especialmente diseñada para no alterar sus sentidos, durante casi toda su vida. Su padre, preocupado por ella, buscó incansablemente a un médico que la pudiera curar. Cuando encontró al posible salvador/curador (¿?) éste le dijo que era necesario llevar a la criatura al mar. El mar sería la cura, la medicina perfecta. Curaría la hipersensibilidad de su hija con la intensidad de las olas, la espuma que se convierte en brisa, la sal, el agua, el frío. La inmensidad del mar versus la inmensidad de los sentidos. Violencia vs percepción.
Mucho ha cambiado desde la última ocasión que escribí en este blog. No es que haya escrito en otros blogs o alguna columna de algún diario nacional. No, no publiqué nada desde que deseé a Violeta un feliz cumpleaños hace años. Hace un par días recibí un mensaje de ella que decía algo más o menos así "Oscar, hay que abrir de nuevo el blog y reseñar cafés. Saludos." El mensaje me pareció abrupto, violento. Transgredió la tranquilidad que reinaba mientras tomaba una taza de café insoportablemente malo y sin embargo me dio mucha alegría. Por supuesto respondí que si.
Tuvimos (Violeta tuvo) problemas para acceder al blog. No recordábamos la contraseña (ella la recordó, yo no tenía idea de cuál era) y actualizó nuestro perfil. Ya no somos un par de tesistas, ya no somos taaaaan jóvenes (aunque aún lo somos) y Violeta es cada día más violenta -yo por mi parte cada vez soy más pasivo-. A pesar de los cambios estoy contento de compartir de nuevo este espacio con ella.
No creo reseñar cafeterías. Más bien ofrezco textos no tan largos, algunas fotografías y, sobre todo, análisis poco profundos y reflexiones con una trascendencia inversamente proporcional al tamaño de Agustin Carstens. Así que lo invito a ponerse cómodo y a disfrutar.
Pd. Me gusta el blog porque no tengo que justificar el sentido de lo que escribo ni revisar la congruencia del texto, así que putos todos.
Mucho ha cambiado desde la última ocasión que escribí en este blog. No es que haya escrito en otros blogs o alguna columna de algún diario nacional. No, no publiqué nada desde que deseé a Violeta un feliz cumpleaños hace años. Hace un par días recibí un mensaje de ella que decía algo más o menos así "Oscar, hay que abrir de nuevo el blog y reseñar cafés. Saludos." El mensaje me pareció abrupto, violento. Transgredió la tranquilidad que reinaba mientras tomaba una taza de café insoportablemente malo y sin embargo me dio mucha alegría. Por supuesto respondí que si.
Tuvimos (Violeta tuvo) problemas para acceder al blog. No recordábamos la contraseña (ella la recordó, yo no tenía idea de cuál era) y actualizó nuestro perfil. Ya no somos un par de tesistas, ya no somos taaaaan jóvenes (aunque aún lo somos) y Violeta es cada día más violenta -yo por mi parte cada vez soy más pasivo-. A pesar de los cambios estoy contento de compartir de nuevo este espacio con ella.
No creo reseñar cafeterías. Más bien ofrezco textos no tan largos, algunas fotografías y, sobre todo, análisis poco profundos y reflexiones con una trascendencia inversamente proporcional al tamaño de Agustin Carstens. Así que lo invito a ponerse cómodo y a disfrutar.
Pd. Me gusta el blog porque no tengo que justificar el sentido de lo que escribo ni revisar la congruencia del texto, así que putos todos.
JAJAJAJAJAJA, pero no fue con tanta violencia. Violentas tu desaparición y tu lejanía.
ResponderEliminarNo se porque llegue a su blog tan tarde, me hubiera gustado hacerlo antes, no ahora que mi mente se ocupa en cosas de "adultos" y tener tiempo para escribir aquí sin ser interrumpido se convierte en un "lujo" en mi día. Violeta y la otra persona solo puedo imaginar sus escenas en mi mente mientras visitan las cafeterías y como eran por allá del 2018 o 2015. Se que no es mucho pero créeme o créanme, para mi esos años significaron bastante. Quizás nunca lean lo que les estoy escribiendo, espero no lo hagan ya que no llega a nada. Creo que lo único que estoy tratando de expresar es que después de leer sus blogs a esta hora de la noche puedo decir que me quede con ganas de mas
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